-Siempre va con usted.
-Pues nadie la ve; ni siquiera yo. Nunca he sentido su presencia a mi alrededor.
-Eso es por su naturaleza.
-No entiendo.
-Verá, a la mayor parte del resto no le importa mostrar su desnudez públicamente, al margen de sus motivos, así que todos ellos le prestan su ropa. Y ella, que nunca ha tenido un traje propio, se viste con el atuendo del que encuentre más cerca.
Certera reflexión !
ResponderEliminarMark de Zabaleta
Ahora tengo curiosidad por la interpretación que ha hecho sobre este microrrelato.
ResponderEliminarVeo la empatía que siempre nos acompaña y que toma siempre algo de nuestro intelocutor...
ResponderEliminarSaludos
Mark de Zabaleta
Me gusta esa interpretación. Lo escribí pensando en la humildad; aunque también podría haber sido la tristeza. Esto es lo que más me gusta de escribir ( si se puede llamar así a lo que hago yo), que los que leen hacen suyo el texto y le dan otras connotaciones. Supongo que sigo siendo una niña curiosa en muchos aspectos todavía.
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